Descripción: Tras rodar y montar el último videoclip de Wesphere, "Totalitalitarianism", el grupo me invita al concierto de estreno del disco en el Auditori. Acudo de incógnito y entre las sombras me ubico en mi butaca. Asisto a un alucinógeno concierto donde predomina el trabajo con la modulación de la voz, las bases electrónicas, paisajes emocionales que transitan por diferentes estados, no siempre placenteros. En un momento dado del concierto Max, cantante. Anuncia que tres discos han sido escondidos entre las butacas. Da la casualidad que uno de ellos se encuentra escondido en mi butaca derecha. Se lo cedo a otra persona, manteniéndome todavía en la sombra. Al terminar el concierto hay una avalancha de personas ahcia la salida y hacia los propios artistas. Mi mano se extiende salutativa mientras, efectivamente, saludo a sombras, recuerdos de cenas pasadas, emoticonos de Instagram. Alelado, no consigo llegar hasta los artistas para rendir mis respetos y mostrar mi admiración, el concierto me ha conmocionado, por lo que salgo hacia el exterior de auditorio. Allí me encuentro con la estructura de luz central que aparece en este vídeo. Y con el negro que hay en su centro. Mis emociones entran en colapso. A lo lejos veo a los artistas y los conocidos reuniéndose para tomar algo. El sentimiento que surge es la anacrónica timidez, la refractaria fuerza. Ellos me observan desde lejos grabando el agujero negro y calibran mi locura misantrópica. Por qué demonios, en lugar de acercarme, voy alejándome ante sus mismos ojos. Luego, me desplazo hacia el 22@, donde los iluminados edificios de oficinas me ofrecen planos y paz por la noche.