Viaje póstumo a Salamanca - Biblioteca Casa de las Conchas

@cdrecordable El poeta Gabriel Ventura

Viaje póstumo a Salamanca - Biblioteca Casa de las Conchas

Fecha: Septiembre 2019
Localización: 
Biblioteca pública Casa de las Conchas, Salamanca
Cámara: 
iPhone 11 Pro
Publicado en
Tik Tok – IG stories
Tema: Baila conmigo, de Soleá Morente

Descripción: Misterioso regreso a la ciudad en la que estudié entre 2004 y 2011. Enric y Gabriel me invitaron a acompañarles un fin de semana. Una institución pública los había invitado para realizar una acción artística. El vídeo fue grabado en el interior de la bibilioteca pública de la Casa de las Conchas, mientras Enric buscaba un libro en el que esconder un billete de 200 euros. Encontré a Gabriel postrado de esta manera ante un libro de Osho. Allí nos recogió una especialista en turismo de la ciudad y con ella dimos un paseo, para mí revival, por el casco antiguo. En un bar añejo de estudiantes ella nos confesó que quería huir de la ciudad, que había conocido la muerte y que su vida carecía de sentido. Trabamos cierta amistad con ella. Hubo confesiones de altura, esa mañana. Le dijimos que queríamos visitar el mítico cementerio de arte de la ciudad y ella dijo que nos acompañaría en su coche. Nos citó a las 16h cerca de su casa. Cuando acudimos ella se presentó sin el coche. He perdido las llaves, dijo, no puedo acompañaros. Propusimos iniciar una búsqueda de las llaves del coche. No quiso aceptar. Las llaves se habían perdido en el interior de su misma casa, debido al caos en el que vivía. Sentía vergüenza , dijo. No quería que viéramos su casa. Entre lágrimas nos despedimos junto a un taxi. El taxi nos transportó en coche hacia el Cementerio en el que yacen enterradas obras de incalculable valor (aunque dicen que ya han sido expoliadas). Grabé otro vídeo en el cementerio.

Enric había escondido un billete de 200 euros en el interior de un libro sobre caniches. Se trataba de una acción performática cómica, dentro del contexto de su obra en torno a los archivos y sus documentos. Por la noche dimos una conferencia acerca del tema. Yo había preparado un amplio texto acerca del manuscrito Voynich y sus misterios. Mientras lo leía ante un público ciertamente extrañado, Enric me interrumpió y señaló: "Esto de lo que hablas es muy interesante, pero no tiene nada que ver con lo que hemos venido a hablar aquí". Yo no sabía realmente qué habíamos ido a hablar allí. En mi cabeza yo hacía de escudero de mis dos acompañantes en su viaje. En mi cabeza era aquel un viaje turístico y la conferencia un pretexto cualquiera. Ellos ciertamente tampoco sabían de qué trataba el asunto, y la conferencia, aunque diletante y feliz, careció de conexión con la obra, incluso con nosotros. Entre el público había antiguos amigos. Cuando se supo que había un billete de 200 euros en el interior de un libro escondido en la Biblioteca, los periodicos lo publicaron y hubo agitación en la ciudad. Nuestros paseos continuaron aquella mañana. Estuvimos mucho rato en el interior de la sede de Editorial Delirio, con el mítico editor Fabio de la Flor. Él nos mostró cómo funcionaba el perverso sistema de distribución editorial. Sentados en tres pequeñas sillas de plástico, escuchamos su demostración del hundimiento de la industria editorial en el plazo de unos años fascinados. Su voz profunda y precisa, su expresivo cuerpo. Salamanca es ciudad de almas poderosas. Nosotros como catalanos solo podíamos escuchar y atender a aquellas energías telúricas. En el hotel comimos en un sótano que hacía las veces de comedor y de discoteca por las noches. Bajo la bola dorada profundizamos en nuestras vidas. Tenemos pendiente reeditar ese viaje.

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